" ... La existencia de este blog, o en todo caso, la existencia de mis versos, no obedecen a ningún objetivo en particular, únicamente a la necesidad imperiosa de expresar algo que, de no hacerlo, me ocasionaría una lenta agonía (que al menos, aún no deseo) o la más terrible e imborrable frustración.



Libres son entonces de ingresar o no a mi enrevesado universo.



Todos son bienvenidos.... a pesar de mi querida misantropía.





Mauro De La Barra

maurodelabarra@hotmail.com

13 junio, 2011

Cuando la noche susurra

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ella estuvo desnuda
sobre la arena del desierto
esperando
la llegada de los buitres
de traje negro
soy un guerrero hambriento
con su sexo tatuado
sobre  mi cuerpo
su dulce amnesia
ha hecho que olvide
que en la punta de mi lengua
halló
el irresistible placer de las penas
de la carne
de la tierra
que se alejó de mis huesos
y huyó hacia el filo profundo
del invierno
golpeó su bella faz
contra las rocas del tiempo
y juró
desconocer
la temperatura
del interior
de mi cuerpo
vagó sin remedio
durmió con dementes
fue rescatada
por un asesino en serie
liberada aparentemente
más una noche
fue apedreada
en el pecho
y en el vientre
besó los tibios pies
de la muerte
río nerviosamente
e inesperadamente
al no poder seguir luchando
contra su propia alma
admitió haber cometido
su cruenta venganza
pidieron la pena máxima
y el día de su sentencia
clamó por piedad al jurado
pero el pueblo fue escuchado
antes de partir
sólo pidió
soñar
con aquella tarde perfecta
donde el Sol
juntó sus siluetas
luego miró los ojos
de su verdugo
con infinita tristeza
quien al percatarse
de su belleza
sólo murmuró:
“Lastima nena”
 y sin demora
realizó
su mejor tarea


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